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Artículo del Embajador de Rusia Yuri Korchagin y del Cónsul Honorario en el Principado de Andorra Pere Joan TOMÀS "El quinto aniversario de la reunificación de los pueblos de Crimea y Rusia: un hito importante en la larga historia común"

versión en catalán

 

El quinto aniversario de la reunificación de los pueblos de Crimea y Rusia:

un hito importante en la larga historia común

 

Ha transcurrido un lustro desde que la República de Crimea y la ciudad de Sebastopol volvieron a formar parte de la Federación de Rusia. El momento histórico se produjo el 16 de marzo de 2014 cuando una clara mayoría de los habitantes de estos territorios (el 96,77% de Crimea y el 95,6% de Sebastopol) de manera democrática y en plena conformidad con la Carta de las Naciones Unidas y el derecho internacional votaron a favor de la reunificación con Rusia. Los resultados del referéndum son un claro reflejo de que la población de Crimea no sólo ha conservado en su memoria la estrecha relación secular que la une con Rusia sino ha tomado su libre decisión de seguir escribiendo nuestra historia común.  

La península formó parte de Rusia desde 1783 hasta 1954, año en el que fue trasferida a la República Socialista Soviética de Ucrania en el marco de la entonces Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS). En aquel entonces era inimaginable pensar que la URSS en algún momento pudiera disolverse. Tras producirse el hecho e independizarse Ucrania, Crimea siguió formando parte de la misma.

El golpe de Estado en Kiev que desembocó en el derrocamiento del legítimo presidente de Ucrania Víctor Yanukóvich en febrero de 2014 supuso un giro de 180º para Crimea. Temiendo el auge del nacionalismo racista y xenófobo en el país, recibiendo amenazas de expediciones de castigo desde Kiev, donde las nuevas autoridades autoproclamadas ucranianas hacían malabares políticos con diversos textos constitucionales en el intento de justificar su derecho a permanecer en el poder, las autoridades de la península decidieron votar por su nuevo futuro.

El periodo ucraniano en la historia de Crimea fue marcado por una notable decadencia de sus infraestructuras y el estancamiento de su desarrollo como balneario, tan venerado anteriormente por todos los soviéticos que solían veranear allí. Una región con un potencial envidiable pero pésima gestión administrativa dependía completamente de las escasas subvenciones del gobierno central. Después de 2014 la península de Crimea ha tenido que hacer frente a una serie de contratiempos derivados de la presión de sanciones: aislamiento económico, bloqueo energético, interrupción de las conexiones de transporte, etc. Sin embargo en los últimos cinco años los habitantes de la República de Crimea y la ciudad de Sebastopol han podido revitalizar las infraestructuras de la península y mostrar tendencias positivas de desarrollo. En este contexto y en el marco de la celebración de la nueva etapa esperanzadora para Crimea quisiera recordar a los estimados lectores algunos de los principales logros.

La reunificación de la península con Rusia ha dado un poderoso impulso al desarrollo de la economía de Crimea y Sebastopol en todos los ámbitos, algo que hubiera sido prácticamente imposible sin el establecimiento de conexiones seguras de transporte y abastecimiento energético independiente de la península. Desde 2014 se han erigido grandes obras de infraestructura como el puente sobre el estrecho de Kerch de 19 km de longitud (el más largo de Europa) que tanto territorial como simbólicamente ha unido Crimea con la Rusia continental. También hay que mencionar la autopista “Tavrida”, futura arteria principal de transporte de Crimea de 253,5 km que pasará por 6 ciudades y 43 pueblos, y cuyo primer tramo de 190 km se inauguró en diciembre de 2018.

Otra instalación de infraestructura prioritaria para Crimea – el nuevo complejo aeroportuario internacional de Simferopol – se abrió al tráfico aéreo el 16 de abril de 2018, tan sólo 22 meses después del inicio de la construcción. La nueva terminal del aeropuerto de Simferopol es una de las más grandes terminales aéreas regionales en términos de número de vuelos (200 diarios en verano), capaz de atender a 6,5 millones de personas por año.  

Cabe subrayar que también se resolvieron los problemas de suministro de energía. Las entregas de electricidad que Crimea solía adquirir a Ucrania se interrumpieron después de la detonación en 2015 por parte de ultras ucranianos de una línea de transmisión energética en la región de Jersón, situada en el sur de Ucrania. Con el fin de resolver el problema se establecieron cuatro líneas de puente de energía en el fondo del estrecho de Kerch. Se ha alcanzado la autosuficiencia energética de la península tras completarse recientemente la puesta en marcha de las nuevas centrales Balaklávskaya (en Crimea) y Tavrícheskaya (en la región de Krasnodar, al otro lado del estrecho de Kerch).

La rápida renovación de las infraestructuras y el desarrollo económico de esta región rusa contribuyeron ampliamente al desarrollo de su potencial turístico. Así en 2018 el flujo turístico en Crimea batió el récord de los últimos cinco años y alcanzó 6,8 millones de visitantes. El hecho de que el año pasado 1 millón de turistas ucranianos visitaron la península también es otra clara ilustración de ello. En este contexto hay que mencionar que Crimea cuenta con tres idiomas oficiales – ruso, ucraniano y tártaro.

Pese a las sanciones y a la política de algunos países occidentales francamente discriminatoria contra Crimea y sus habitantes, el interés por la península es cada vez tanto entre los propios rusos como turistas extranjeros. Como dice un refrán popular ruso: “Más vale ver una sola vez que oír cien veces”, cuya verdad pudieron comprobar numerosas delegaciones extranjeras, incluyendo la reciente – de diputados franceses que visitaron Crimea en marzo de 2019. Otro ejemplo de que el aislamiento de Crimea es un mito hay que recordar la exitosa celebración en 2018 del Foro Económico Internacional de Yalta que acogió 612 representantes de 71 países. 

A pesar de los ejemplos citados lo que más cuenta es sin duda la opinión de los propios ciudadanos de Crimea. Según los resultados del sondeo realizado recientemente por el Centro de Estudio de la Opinión Pública de Rusia la mayoría de los encuestados en la península (el 88%) evalúan positivamente la reunificación de Crimea con Rusia, mientras que el 73% de los mismos consideran que en este corto periodo la península ha logrado unos avances de desarrollo sin precedentes.

Estimados amigos andorranos, espero que estas breves pinceladas hayan podido picar un poco su curiosidad por la magnífica región de Crimea. Les invito a conocerla en toda su diversidad, a realizar un viaje inolvidable por esta magnífica tierra y ver con sus propios ojos, sin clichés ni estereotipos, cómo es la península, conocer su gente y los grandes avances que esa región ha conseguido en los últimos cinco años.  

 

Embajador de Rusia en el Principado de Andorra

Yuri Korchagin