La capital de la Federación de Rusa, Moscú, está rodeada por colinas que circundan la ciudad en la que se mezclan con un gusto exquisito monumentos, parques y zonas residenciales con preciosos jardines. Surcada por el Río Moscova, la ciudad se encuentra salpicada por numerosos canales y ríos navegables que la unen con otras zonas del país conectando con el Mar Báltico, el Negro, el Blanco, el Azov y el Caspio. Pero no sólo está bien comunicada a través del agua, Moscú cuenta con un impresionante despliegue de redes de comunicación, por aire, cuenta con un aeropuerto que admite vuelos internacionales y por tierra con una excelente red de ferrocarril y de carreteras. Esto ha permitido que la capital de la República haya desarrollado una economía muy diversificada tanto en industria como en el sector alimentario y sobre todo, en el campo editorial. Moscú, además, cuenta con una estupenda red de metropolitano y con numerosas líneas de autobús, tranvía y trolebús. El recorrido puede iniciarse por uno de los lugares más representativos de toda la Comunidad de Estados Independientes, la Plaza Roja.

 

La Plaza Roja

 

 

El centro de la vida de Moscú se encuentra situado en esta plaza. Fue proyectada por orden de Iván III con el fin de crear un espacio abierto frente a las murallas del Kremlin que impedían los incendios, frecuentes en la época y que podían arrasar la ciudad en poco tiempo ya que los edificios estaban construidos con madera. Llegar es muy fácil ya que todos los transportes públicos pasan por ella. Realmente hermosa, la Plaza Roja es una de las más grandes del mundo con una extensión de 74.831 metros cuadrados de superficie, 695 metros de largo y 130 metros de ancho. Está flanqueada por las murallas del Kremlin al oeste, los almacenes GUM al este y la catedral de San Basilio al sur. Presidiendo la plaza, solemne se levanta el Mausoleo de Lenin. Aunque en un principio fue de madera, desde 1930, el granito rojo ucraniano resalta bajo el sol moscovita la belleza de esta pirámide truncada, cuya parte superior está ocupada por una columnata. La entrada, celosamente guardada por dos militares con uniforme de gala, da acceso a una cripta refrigerada en cuyo centro se hallan, conservados perfectamente, en el interior de una urna de cristal, gracias a un complejo proceso de momificación, los restos de Lenin. A los lados se encuentran las banderas de la Comuna de París, regalo de los comunistas parisinos en 1924 y la de la Internacional Comunista. Este mausoleo fue proyectado en solo dos días por Aleksei Scusev, los siguientes a la muerte del dirigente ruso acaecida el 21 de enero de 1924. Al principio fue construido en madera para, en 1929 y 1930, ser reconstruido en granito rojo de Ucrania. El sepulcro es obra de Konstantin Melnikov.

 

El mausoleo y la tumba de Lenin

 

 

Después de visitar el Mausoleo se suele pasar a su parte trasera. Allí junto a los muros del Kremlin, rodeadas de árboles, se encuentran las tumbas y nichos de comunistas de relevancia como Stalin, el americano John Reed, Karpov, el noruego Olsen, Gorki y el astronauta Gagarin entre otros.

A un extremo de la Plaza Roja se encuentra el Museo Histórico del Estado construido en los años 1878-1883Este es el museo más antiguo de Rusia y su fundador fue el prestigioso arqueólogo Uvarov. Consta de 57 salas en las que se exponen 300.000 objetos de un total de 4 millones que componen el total de la colección. La muestra abarca desde la Prehistoria hasta la Segunda Guerra Mundial. Destacan como joyas de la colección, un sarcófago del reino del Bósforo del siglo VI a.C. las vasijas griegas del siglo VI a.C., las puertas de Santa Sofía de Novgorod del XIII y los iconos de los siglos XIV y XVI. También se pueden ver manuscritos, obras de Usakov, objetos personales de Pedro I, las mejores obras de Lomonosov, el trineo que Napoleón utilizó durante la guerra, sin olvidar el estupendo recorrido por los acontecimientos más importantes de la Revolución Rusa y la Segunda Guerra Mundial.

En el lado este de la plaza, los Gosudarstvenniy Universalniy Magazin, más conocidos como Almacenes GUM que ocupan 250 metros distribuidos en tres pasajes repletos de tiendas que tiene tres pisos cada una. Su construcción, de finales del XIX, fue proyectada por Pomeranceu respetando la ubicación y distancias del mercado del siglo XV que existía en aquel lugar pero envolviéndolo con bóvedas de cristal y estructura de hierro, los materiales más modernos en aquel momento.

 

 

La Catedral de San Basilio, construida por mandato de Iván el Terrible, se levanta al sur de la Plaza Roja. La torre del centro, en forma de piña, está rodeada por nueve cúpulas de distintos tamaños y colores realmente bellas y originales. Estas nueve cúpulas corresponden a nueve capillas a las que en 1588 se añadió una más para acoger los restos de Basilio, el vidente que predijo la muerte del hijo de Iván el Terrible a manos de su padre. El interior, en el que se mezclan perspectivas realmente curiosas y piedras de distintos colores, consigue un entorno muy apropiado para la oración y el recogimiento. Son muy interesantes los frescos del siglo XVI.

 

Basílica de San Basilio

 

 

Para la mayoría de los extranjeros, la basílica de San Basilio es el símbolo de Moscú. A diferencia del kremlin, la basílica está cerrada para turistas todos los martes y los primeros lunes de cada mes. Está considerada parte del Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO.

Al frente de la catedral se encuentra el Lobnoe mesto, pedestal de piedra en forma de círculo en el que se presentaban los herederos al cumplir 16 años, se leían los edictos de los zares y se ejecutaban las penas capitales. Entre la Catedral y el pedestal se levanta el primer monumento civil de Moscú, el Monumento a Minin y Pozarski, realizado en 1818 por Martos. Esta escultura honra a los héroes que consiguieron la liberación de la ciudad del dominio polaco en 1612 y fue pagada en su totalidad con dinero conseguido en una colecta popular.

 

El Kremlin

 

 

Después de conocer a fondo la Plaza Roja hay que traspasar la muralla para entrar en uno de los conjuntos artísticos más impresionantes del mundo, el Kremlin.

Rodeado por 2 kilómetros de muralla, con 20 preciosas torres, que se pueden recorrer a través de un paseo paralelo al río y el jardín Alesksandrovskiy que hacía las funciones de foso del Kremlin. Esta ciudad dentro de la ciudad se ubica en una colina de 40 metros de altura. Construida en madera en 1156 fue arrasada por el fuego 82 años después para ser reconstruida ya en piedra blanca en 1368, lo cual no evitó que fuera nuevamente destruida, esta vez por los tártaros. El Kremlin que conocemos hoy es obra de los arquitectos italianos Fiovaranti, Solari, Sforza, Rufo y Aloiso, todos ellos contratados por Iván III. Con el mandato de Pedro I el Kremlin dejó de ser el centro del país ya que el zar temía que se repitieran las intrigas y asesinatos que tuvieron lugar en el interior de esta fortaleza. Por ese motivo trasladó la corte a San Petersburgo en 1713. Esta impresionante ciudadela recuperó su importancia con la revolución de 1917 al instalarse el Gobierno Soviético en sus hermosos palacios.

Para acceder a la ciudad fortificada los turistas tienen que entrar por la Torre Spasskaia (de San Salvador). Esta torre octogonal fue construida en 1491 por Solari y restaurada en 1625, año en que se instaló el Kremlevskie Kuranty, famoso carrillón de 10 campanas y 25 toneladas de peso cuyo sonido es retransmitido por Radio Moscú a las seis de la tarde y a las doce de la noche. La torre está presidida por un hermoso icono del Salvador ante la que debían quitarse el sombrero todos los ciudadanos, incluido el zar.

También son obra de Solari, aunque no alcanzan la belleza de la torre Spasskaia, la Torre del Senado, la dedicada a Nicolás de Mozajsk cuyo punto más alto alcanza los 70 metros de altura, la Torre del Arsenal, la torre Borovickaia, actual salida de los visitantes del Kremlin y la de Constantino y Elena. De las restantes 14 torres de la muralla destacan la Torre de la Trinidad por ser la más alta con 80 metros y la Torre del Agua, por estar rematada con una estrella de rubí.

 

La iglesia de nuestra Señora de Kazán

 

 

La catedral de Kazán fue construida en 1636 en honor al icono de la Virgen de Kazán, descubierto en 1579. El icono representa a la Virgen María como protectora de la ciudad de Kazán: se creía que los milagros del icono contribuyeron a convertir al cristianismo a los tártaros, habitantes de la región, y a otras hazañas del país. La catedral se construyó gracias a donaciones personales del primer zar de la dinastía de los Románov, Miguel I.

En 1936 la catedral fue destruida: por orden de las autoridades soviéticas la sustituyeron unos baños públicos. Entre los años 1990 y 1993 el templo volvió a ser levantado basándose en los planos originales.

 

La tumba del Soldado desconocido

 

 

La tumba junto con la llama eterna conmemoran a todos los caídos en la Segunda Guerra Mundial (26 millones de personas). El monumento está custodiado por la guardia de honor cuyo cambio merece la pena ver (cada hora en punto).

 

Almazniy Fond (El Fondo de Diamantes)

Junto a este fabuloso museo y para no perder los destellos, se encuentra el Almazniy Fond en el que se guardan los diamantes y piedras preciosas en bruto o talladas que son, en realidad, el verdadero erario de Rusia. Este tesoro se encuentra dividido en dos salas. En la primera se pueden admirar los diamantes de enormes dimensiones como la Estrella de Yacuzia de 232 quilates o la Gran Iniciativa de 135. En la sala segunda se encuentran los diamantes históricos cuya talla les confiere un valor único como el Orlov de 189 quilates que en su origen tenía 300 o el Diamante del Sha de 88,70 quilates. También se guarda la corona de Catalina II recubierta por 4.936 diamantes y otras piedras preciosas de gran valor.

 

El teatro Bolshoi de Moscú

 

 

El Teatro Bolshoi es el más importante de Rusia y uno de los más reconocidos del mundo. Su edificio fue construido en 1825 por el arquitecto Ósip Ivánovich Bovet y hoy es un maravilloso ejemplo de la arquitectura clásica nacional y un emblema de la cultura rusa.

Es el segundo teatro más grande de Europa ofrece espectáculos de ópera y ballet que son reconocidos a nivel internacional. Casi la totalidad de las obras que se representan son de origen nacional y están protagonizadas por la compañía de Ballet y Ópera del Bolshoi. Esta entidad fue fundada en 1776 por iniciativa del príncipe Piotr Urúsov.

 

La Catedral del Cristo Salvador, principal templo en Moscú

 

 

El templo más importante de la Iglesia ortodoxa rusa hay que ver en Moscú, allí es donde oficia el Patriarca. Solemne, majestuoso e impresionante monumento tanto por fuera como por dentro.

La catedral fue inaugurada en 1883 y dinamitada en 1931 por orden de las autoridades soviéticas, que buscaban acabar con las prácticas religiosas en el país. En su lugar estaba previsto construir el llamado Palacio de los Soviets: en teoría debería de haber sido el edificio más alto del mundo (de 420 metros) con una estatua de Lenin en su azotea, pero jamás se llegó a levantar. En su lugar, en 1960 se estableció allí la piscina al aire libre Moskvá que existió hasta 1994, cuando empezaron a edificar la catedral en su antiguo emplazamiento. Sin embargo, la nueva versión se diferenció considerablemente de los planos originales. En 2000 abrió sus puertas.

 

La calle Stari Arbat (Viejo Arbat)

 

 

La calle Stari Arbat es uno de los símbolos más famosos de Moscú. Es una de las vías más antiguas de la capital rusa: se construyó en el siglo XIV. Hoy en día es una zona fundamentalmente peatonal, además de un lugar donde se ubican tradicionalmente tiendas de recuerdos, pintores y músicos callejeros.

 

Las estaciones del metro de Moscú

 

 

Es imperdible conocer ver las estaciones del metro de Moscú, único en el Mundo en cuanto a su arquitectura. Esculturas, mosáicos, marmol de todo tipo y otras piedras valorosas, arañas, vitrales (visrieras), pintura mural, ceramica y todo un museo bajo la tierra. Por supuesto no todas las estaciones del total de 197 están hechas con el lujo, pero unas 5-6 más destacadas hay que ver si está en Moscú.

 

Convento de las Novodevichi

 

 

El convento Novodevichi (el Nuevo de doncellas) y al mismo tiempo fortaleza donde las mujeres de la sangre real hacían el retiro espiritual y tomaban hábito al quedarse en este.

El monasterio femenino de Novodévichi fue fundado en 1524. En 1689 fue ordenada allí Sofía Románova, la hermana mayor de Pedro I. Ella gobernó Rusia entre 1682 y 1689, pero al ganar una revuelta su hermano menor, se vio obligada a recluirse en el Monasterio de Novodévichi para vivir allí como monja.

En 1922 las autoridades soviéticas cerraron el monasterio y abrieron en sus terrenos el Museo de la Mujer Emancipada. En 1945 volvieron a empezar a oficiar religiosas en la iglesia principal del monasterio. En 1994 renovaron el beaterio.

En 2004 fue proclamado Patrimonio de la Humanidad.

 

La Universidad estatal de Moscú

 

 

Una de las 7 torres "hermanas" de la época de los años 1950, siendo la más alta, elegante e impresionante al visitar esta atracción cerca.

 

El Parque conmemorativo de la Victoria

 

 

Un conjunto de diversos monumentos y templos de diferentes religiones dedicados a la Segunda Guerra Mundial. El parque entero tiene 130 hectáreas.

 

El arco de Triunfo de Moscú

 

 

Levantado en el s. XIX conmemora la expulsión de las tropas de Napoleón desde Rusia.

 

El complejo de rascacielos modernos Moscow-city

 

 

En Moscú crearon una zona especial para la construcción moderna de oficinas y apartamentos. No está en el centro para no dañar la vista, para observar todo el conjunto como en la palma de la mano hay que ver desde la avenida de Kutusov.

 

Galería Estatal Tretiakov.

 

La Galería Tretiakov está considerada el principal depositario de bellas artes rusas: su colección cuenta con objetos que datan desde el siglo XI hasta el XX. Fue fundada por el comerciante moscovita Pável Mijáilovich Tretiakov. A mediados de la década de 1850 Tretiakov empezó a formar su colección de bellas artes. En 1867 la expuso para el público y en 1892 la donó a la ciudad de Moscú: en aquel entonces contaba con 1276 pinturas, 15 esculturas y una colección de iconos rusos. En 1918 la Galería fue proclamada propiedad estatal de la República Soviética de Rusia.

 

 

Museo de Bellas Artes A.S. Pushkin de Moscú

 

El museo, fundado en 1912, cuenta con una colección de unos 560 000 objetos de arte europeo desde la Antigüedad hasta el siglo XX.

 

 

Museo Politécnico

 

Es uno de los museos politécnicos más antiguos del mundo. Su base son los fondos provenientes de la Exposición Politécnica del Imperio ruso que tuvo lugar en Moscú en 1872. Tardaron 30 años en construir el edificio del museo, que se inauguró en 1907. Hoy en día su colección cuenta con unos 160 000 objetos que representan la historia de la tecnología en Rusia y unos 3 millones de libros.

 

Museo Conmemorativo de la Cosmonáutica.

 

El Museo Conmemorativo de la Cosmonáutica fue inaugurado en 1981 para celebrar el 20 aniversario del vuelo espacial de Yuri Gagarin. Su colección cuenta con muestras de tecnología espacial, pertenencias personales de los cosmonautas y documentos de archivo. En 2009 se finalizó su remodelación. La exposición recibió una maqueta de un módulo de la Estación Espacial Internacional Mir y una sala de máquinas de entrenamiento para cosmonautas, donde los visitantes pueden poner a prueba sus propias fuerzas. Como souvenir se puede adquirir comida espacial en tubos.

Ya a las afueras de Moscú se debe visitar el Kolomenskoe, una de las residencias de verano de los antigios zares.

 

 

Destacan en su interior la Iglesia de la Ascensión de 1532, el campanario circular de la desaparecida Iglesia de San Jorge y los cuatro museos que acogen iconos de gran belleza. No deje de pasear por el parque en el que encontrara árboles centenarios y construcciones de madera muy hermosas.

Las Colinas de Gorki, a 35 kilómetros de Moscú, se extienden a lo largo de 10.000 hectáreas. En el centro se levanta la Villa en la que residió Lenin hasta su muerte y que se conserva tal y como estaba el 21 de enero de 1924, fecha del fallecimiento del dirigente ruso.

El Palacio ArhangelSkoe, situado a 21 kilómetros de la ciudad, fue construido a finales del XVIII por Charles De Hairne siguiendo el estilo neoclásico. En su interior se aloja un Museo de Arte que contiene esculturas y pinturas francesas, holandesas e italianas de gran calidad, esmaltes, porcelanas, objetos de vidrio y platería. Especial mención merecen los cuadros de Yusupov. Pasee por el precioso parque del exterior y no olvide visitar el teatro de 1818 con decoración de estucos y pinturas diseñada por Gonzaga.